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Tras realizar la reforma de su principal restaurante, Santiago Domínguez volvió a confiar en nuestro estudio de arquitectura para realizar la reforma de otro restaurante de su propiedad. Anteriormente había estado dedicado a ser una ostrería, pero Santiago nos encargó que lo reconfigaráramos para acoger un restaurante más funcional, con una cocina mayor en la que poder preparar comidas más elaboradas.
La fachada ha sido modificada completamente, manteniendo únicamente parte de las molduras de madera de la pieza original. Los huecos de fachada se han ampliado y las carpinterías originales de madera han sido sustituidas por perfiles metálicos mucho más delgados con el objetivo de introducir la mayor cantidad de luz al interior y también para que el interior del restaurante pueda ser visto en su totalidad desde la calle. El rótulo luminoso original se ha sustituido por uno mucho más atractivo. El restaurante se vuelve más presente para los viandantes.
El rótulo luminoso adquiere una dimensión especial al ser el elemento más característico de la fachada, invitando a los transeúntes a acercarse al restaurante.
Justo en frente del restaurante existe una masa vegetal que lo protege y da más intimidad cuando se usa la parte de la terraza. Al carecer de una vista frontal desde la zona más transitada se ha buscado una doble orientación para la fachada. Esta doble orientación se consigue gracias al rótulo luminoso, que actúa como reclamo a ambos sentidos, por un lado el parque adyacente y por otro el paseo marítimo.
Como única limitación Santiago nos pidió que conservaramos el suelo de mármol y el trabajo de carpintería de madera que poseía el restarante original. Esto incluía todo el panelado y molduras de las paredes, pilares, fachada y barra. Todos estos elemenos fueron restaurados, pintados o reemplazados siguiendo el patrón original. Los techos de escayola se modificaron manteniendo también las formas originales y conservando las molduras de las tabicas, pero añadiendo paneles acústicos y un techo de lamas de madera que dota de un nuevo carácter al interior del restaurante. Del techo de madera cuelgan las nuevas luminarias.
La madera funciona como material recurrente en todo el interior, desde el suelo hasta el techo, pasando por las paredes, los pilares, las lámparas e incluso el mobiliario, que es el original reparado. Este tratamiento de la materialidad hace un interesante juego de texturas cálidas, convirtiendo el comedor en un espacio acogedor pero contemporáneo, en contraposición a la aparición de materiales metálicos y polímeros de la fachada.
Autor: GonzaloGutierrez
Visualización: Ombra
2019
Marbella, España